Arreglar barnizados a muñequilla

El barnizado a muñequilla, también conocido como pulimento francés o barniz a muñeca, es fácilmente reconocible: tiene un maravilloso brillo cálido, dura cientos de años en perfectas condiciones y para mantenerlo, basta con pasarle un paño seco. Pero lamentablemente, se estropea al entrar en contacto con el agua. Barnizar muebles a muñequilla es algo muy complicado que sólo se aprende con los años y la experiencia; pero reparar los desperfectos que pueda sufrir un barniz de este tipo es algo al alcance de cualquiera.

Para arreglar una superficie barnizada con goma-laca a muñequilla (la goma-laca es un barniz a base de escamas como las de la imagen, que se diluyen en alcohol) sólo es necesario contar con los siguientes materiales: un trozo de tela de camiseta blanco y limpio, borra para muñequillas o lana, lija nº 400, aceite de vaselina, alcohol para barnizar o alcohol desnaturalizado (puede servir también el de 96º) y goma-laca en escamas. La goma-laca se prepara cubriendo las escamas con alcohol dentro de un frasco de cristal, y añadiendo como tres dedos más de alcohol a la mezcla.

La goma-laca se deja hidratar un día, dándole la vuelta al frasco de vez en cuando; cuando esté lista se debe colar con una media o una gasa.

Si un barnizado a muñequilla ha perdido brillo, podemos pulirlo de nuevo salpicando la superficie con unas gotas de aceite de vaselina y frotando con la muñequilla, ligeramente mojada en alcohol, haciendo ochos en el sentido de la veta hasta que vuelva a relucir. En el caso de que un vaso o un tiesto hayan dejado un cerco en el barniz, habrá que lijar con cuidado toda la superficie en el sentido de la veta y “pintar” el cerco con goma-laca para rellenarlo. Después, una vez seca volveremos a lijar y salpicaremos el barniz con aceite, para volver a abrillantarlo de la manera indicada.

Imágenes: Loadtr, Engraving forum, Guitarraflamenco.com.