Tener una casa segura y preparada contra cierto tipo de infortunios, como el fuego o el envenenamiento por inhalación de CO2, proporciona una tranquilidad extra en el hogar con una mínima inversión. Ningún tipo de seguro del hogar te hará sentir en casa tan seguro como una prevención activa de accidentes por causa del fuego o el gas.
Los accidentes domésticos por incendios o inhalación de gases tóxicos parecen desgraciados sucesos que rara vez ocurren en las casas, y desde luego siempre a los demás... ¡Falso! Nadie está totalmente a salvo de infortunios de este tipo, pero sí es posible poner en marcha una protección activa, barata, sencilla de instalar y de fácil mantenimiento.
Red eléctrica más segura
Es imprescindible disponer de una red eléctrica en perfectas condiciones dentro del hogar. Si a menudo saltan los interruptores del cuadro eléctrico (obligatorio a la entrada de casa), conviene que la instalación sea revisada por un electricista. De todos modos, conviene tener en cuenta que la prevención es a menudo la mejor defensa frente a los incendios provocados por cortocircuitos. Uno de los incumplimientos más frecuentes en las casas es el de sobrecargar los enchufes, conectando demasiados aparatos eléctricos a ellos mediante ladrones y regletas. O el de tener cables en malas condiciones, en los que la funda de plástico se aprecia dañada. Evita siempre este tipo de situaciones, encargando a un electricista que multiplique el número de conexiones a la red eléctrica, ya que es un pequeño gasto (aproximadamente 35 €/unidad) que proporciona comodidad y tranquilidad.
Prevención frente a los gases tóxicos
Una de las principales amenazas en el hogar es la posibilidad de que el aire que respiramos contenga monóxido de carbono, procedente de una mala combustión, ya que se trata de un gas incoloro, inodoro y sin sabor. La primera medida para evitar la inhalación de gases tóxicos en el hogar es hacer revisar la caldera de calefacción y/o agua caliente una vez al año, al tiempo que pasar las inspecciones obligatorias por ley. Además es necesario mantener las rejillas de ventilación limpias y sin tapar en la cocina, tendedero o lugar donde esté instalada la caldera. Las mismas precauciones en cuanto a ventilación se deben tener si los fuegos para cocinar y el horno se alimentan de gas (natural, butano…).
Instalación de detectores de humo
Han probado ser un arma eficaz para prevenir males mayores, y se han popularizado por su fácil instalación y mantenimiento (a pilas). Deben instalarse cerca de los dormitorios, ya que una buena parte de los incendios en las casas se producen durante la noche, mientras dormimos. Se instalan en el techo, o en la parte alta de las paredes. Una buena medida de precaución es no fumar nunca en la cama, sino establecer una sola zona común donde se pueda hacer (si hay niños o personas mayores o enfermas, conviene hacerlo en el exterior de la casa).
Extintores de incendios como medida activa
Mantener un extintor de fuego en la casa (y cambiarlo cuando caduque) es una excelente medida para evitar que un pequeño fuego termine convirtiéndose en grande. Es importante elegir la clase de extintor adecuada, ya que existen diferentes opciones para diferentes tipos de fuego. Lo ideal es uno de clase ABC, que es capaz de terminar con la combustión de los materiales más usuales en las casas.
Precauciones frente al fuego…
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Publicado el: 02-01-2012 | Autor: María Tebar