Las casas abuhardilladas tienen un encanto especial, pero en ocasiones también suponen un problema a la hora de decorarlas y amueblarlas, pues no todos los muebles pueden ser colocados en las zonas bajas, por ejemplo, los armarios roperos, que necesitan de una cierta medida que de cabida a trajes y pantalones.
Sin embargo hay algunas estancias que por las enormes posibilidades de su diseño encajan perfectamente en estos espacios desiguales, es el caso de la cocina.
La mayor parte de las cocinas se diseñan de forma modular, esto quiere decir que se diseñan en cierto modo "a medida". Los fabricantes ofrecen módulos de diferentes medidas y tamaño que nosotros podemos ir encajando como si de un puzzle se trata, en el espacio disponible de nuestra cocina.
Si tenemos la suerte de contar con ventanas en el tejado, nuestra cocina será el mejro sitio para trabajar, perfectamente iluminado y bañado siempre por un gran chorro de luz natural… todo un lujo!
Fotografías: Ikea