Decoración de pascua

No queda nada para que lleguen los días de fiesta propios de la Semana Santa, días que muchos aprovechareis para regalaros unas merecidas vacaciones, pero que otros dedicarán a disfrutar de las procesiones y de todas las cosas propias de estos días.

Durante estas semanas de atrás hemos estado buscando inspiración para decorar estos momentos de pascua y poder mostrárosla desde aquí, y nos hemos topado con conejitos y huevos de pascua por doquier.

Pero seguro que muchos de vosotros desconocéis el origen y el motivo por el que estos animalitos se convierten junto a los deliciosos huevos de pascua en los protagonistas indiscutibles de la decoración de todos los escaparates durante estos días.

Dice la leyenda… (…) Cuentan que en tiempos de Jesús, un conejo estuvo encerrado en el sepulcro junto a él y presenció la resurrección. Cuando pudo salir de la cueva y tras haber sido testigo de tal milagro, el conejo fue elegido como el mensajero que comunicara a todos los niños la buena noticia regalando huevos pintados (…)

Como todo lo que tiene que  ver con la religión (con cualquiera de ellas), estas historias solo son leyendas inspiradas en algo en lo que podemos o no creer porque es solo cuestión de fe y de convicción, pero que no obstante nos han traído costumbres y tradiciones a nuestro día a día que por extensión se han desligado de lo púramente religioso, para pasar a ser usos comunes unidos a la fecha.

Hoy en día esos huevos pintados a los que hace mención la leyenda se han convertido en huevos de chocolate o rellenos de golosinas, mucho más apetecibles, y continúan siendo el símbolo de estos días de pascua, muestra de ello son los escaparates de todas las pastelerías, que estos días nos invitan a darnos un capricho muy dulce, o a tener un detalle con nuestro ahijados.

Seguro que estos días muchos tendremos invitados en nuestra casa, o aprovecharemos los días de fiesta para reencontrarnos con amigos y organizar alguna cenita entrañable, y qué mejor idea que utilizar estos motivos como base sobre la que crear la decoración del momento.

Los huevos de pascua pueden convertirse en velas, e iluminar con ellas la mesa donde nos reuniremos con nuestros amigos, o podemos colocarlos simplemente sobre la mesa a modo de centro decorativo.

Sobre la cáscara de los huevos podemos escribir el nombre de los comensales y utilizarlos para indicar a cada uno cuál es el lugar que debe ocupar.

Mientras tanto los conejitos pueden colocarse en cualquier rincón, seguro que a los más pequeños de la casa les encantará tener una decoración tan dulce estos días.

¡Felices pascuas!

Fotografías: Potterybarn