Las fiestas vecinales son un clásico cuando llega el verano, aunque es una costumbre que debido a las prisas y a los nuevos estilos de vida, se está perdiendo en algunos lugares.
Las nuevas construcciones, las ciudades dormitorio… son cosas que poco ayudan a la conservación de estas costumbres, que son a todas luces sanas, ya que mantener una estrecha relación con nuestros vecinos hace mucho más agradable nuestra vida en comunidad.
Estas fiestas suelen tener lugar en la calle o en la plaza donde está situado el edificio, y suelen tener lugar al caer la tarde, por eso la iluminación es un factor fundamental para decorar este tipo de fiesta, y no hay mejor solución que la de llenar de bombillitas el lugar de la celebración.
A la hora de poner la mesa, no necesitamos complicarnos con cosas elaboradísimas, pues en estos casos prima la sencillez por encima de todo. La llegada del verano es una excusa perfecta para organizar una fiesta de este tipo. Ánimo!
Fotografías: Proyect Wedding
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Categorías: Organización de eventos
Publicado el: 22-05-2012 | Autor: Olaia Pellón