Guía definitiva para la limpieza y protección de colchones

Sobre el colchón pasamos un tercio de nuestra existencia, razón suficiente para que sea de calidad, lo cambiemos cada cierto tiempo y lo mantengamos limpio y en las mejores condiciones posibles… Aquí tienes la guía definitiva para la limpieza de colchones. Te sorprenderá…

Sudor, células muertas, pelos, manchas, ácaros… Casi asusta pensar en todo lo que puede acumular un colchón. Por eso, una limpieza periódica completará la acción que cumple la funda de colchón y también la sábana bajera. No hay reglas fijas: la periodicidad depende de cada cual, aunque conviene acordarse al menos en cada cambio de estación. Buen momento también para voltear el colchón y alargar su vida útil, que según los expertos viene a ser de 10 años si tiene un uso continuado…

Pasar la aspiradora sobre el colchón es necesario, pero puede no ser suficiente. ¿Qué hacer entonces…?

Aspira el colchón con el accesorio de tapicerías. Ese es el primer paso para una limpieza pulcra y eficaz del colchón. Pero utiliza siempre el pequeño accesorio de tapicerías para no ensuciar más que limpiar…

Limpia las manchas. Por mucho que lo cuidemos, parece inevitable… Basta que una noche olvides poner la funda para que ese día amanezca el colchón manchado. Lo más probble es que se trate de algún fluido corporal como sangre u orina. Por eso necesitas un limpiador para ese uso, por ejemplo, con un producto a base de enimas naturales. Si prefieres usar productos de toda la vida, puedes hacer la siguiente mecla: dos partes de agua oxigenada, una parte de jabón líquido para vajillas y bicarbonato. Pon la mecla en un bote pulverizador y trata la mancha. Ten a mano un cepillo de dientes para frotar y un trapo limpio y humedecido para ir retirando la suciedad. También puedes hacer una pasta a base de limón y sal, y dejar actuar entre media hora y una hora. Limpia después con una toalla húmeda.

Desodoriza con bicarbonato. Sólo tienes que esparcir bicarbonato sobre el colchón y dejar actuar dos horas para que el colchón recupere el buen olor. Si realizas la operación después de limpiar las manchas, el bicarbonato absorberá la humedad. También se secan antes si pones en marcha un ventilador de techo en caso de que lo haya en el dormitorio.

Airea el colchón. Si tienes oportunidad de airear el colchón en una terraza o similar, hazlo. Nada mejor que el aire y el sol para terminar con las bacterias.

Cómo proteger el colchón

Una vez que has realizado todas estas acciones, piensa en proteger el colchón eficazmente con una buena funda.

Funda de colchón básica. Las tienen en bazares y son la medida más sencilla para proteger el colchón. En realidad son una forma de tapar el colchón si ya tiene manchas o su aspecto no es demasiado pulcro. Están hechas en un tejido de trama bastante ancha y elástico, e incorporan una cremallera. Su precio está en torno a los 5 €.

Funda de colchón impermeable. Se han popularizado las fundas de rizo con base plástica y tela ajustable alrededor. Pasado un tiempo dejan de ajustar como al principio y tienden a moverse sobre el colchón, por lo que pueden ser incómodas. Mejor buscarlos transpirables para que no den calor en verano, y a ser posible antiácaros, con un tejido de algodón patentado, el Acarsan, que cuenta con esa propiedad. Cuestán a partir de 10 € aproximadamente los más sencillos, según medidas de la cama.

Protectores de colchón o colchoncillos. Son una de las últimas opciones en incorporarse a nuestra ropa de cama, pero cada  vez más populares... Protegen el colchón de las manchas y proporcionan una suave y cálida superficie para el sueño. Se adaptan justo a la medida de la superficie del colchón, por lo que hay en varias medidas. Y se ajusta a la parte de abajo del colchón mediante unas cintas elásticas que incorpora en cada esquina, o bien mediante un tejido adaptable que se ajusta como una sábana bajera.

Lo mejor es que los protectores de colchón o colchoncillos se pueden lavar a máquina a altas temperaturas, por lo que la limpieza y la protección están aseguradas. El modelo Skydda Latt de Ikea cuesta 14,99 € en la medida de 160 x 200 cm. El cubrecolchón Velfont, con propiedades termoreguladoras, impermeable y transpirable, que se vende en El Corte Inglés tiene un precio a partir de 129 € según medida de cama.

Fotografías: Kobold de Vorwerk, Frankenstolz , Matratzen, Ikea