Hidrojardineras: ya es posible cuidar plantas sin “presentismo”…

Las hidrojardineras son la opción más adecuada para dejar las plantas en buenas manos cuando no podemos cuidarlas. Las macetas con autorriego se convierten así en la perfecta solución para plantas que nos regalan su belleza en vacaciones pero no podemos mantener durante el invierno… ¡Y además ahorran agua!

Si viajas a menudo y tienes que dejar tus plantas al albur del tiempo… Si has terminado tus vacaciones y has dejado atrás una casa de verano en la que tienes un buen número de macetas que te han regalado flores y frescor estos meses… ¡Qué pena dejarlas ahora a merced de los caprichos de la climatología…!

La alternativa más adecuada puede parecer que es el riego automático por aspersión o por goteo. Pero tiene sus inconvenientes si no compruebas a menudo e in situ el funcionamiento: qué pasa si se va la luz o si una helada hace estallar las tuberías situadas en el exterior… Lo que en principio es una solución magnífica puede convertirse en un auténtico quebradero de cabeza… ¡Lo que te faltaba!

Por eso, las macetas de autorriego se convierten en una solución sencilla y muy adecuada para plantas que han de subsistir solas largas temporadas. La posibilidad de que se autoabastezcan de agua parece magia, pero se rige por unos mecanismos muy sencillos y eficaces…

Cómo funcionan…

Alguien ha llamado a las hidrojardineras “macetas inteligentes”, y la definición no es tan descabellada… Las macetas están dotadas de un depósito estanco donde se almacena el agua y de un unos tubos de absorción por los que la planta puede absorber por capilaridad el agua que precisa en cada momento. Sólo es necesario rellenar la reserva de agua por la boca de riego sin sobrepasar el nivel máximo especificado. ¿Y cómo saberlo? Muy fácil: la varilla sube a medida que la reserva de agua se llena…

Cuánto agua ahorran las macetas de autorriego

Se calcula que el gasto de agua de riego disminuye en un 35 por ciento, por lo que además las hidrojardineras son una interesante fuente de ahorro, pero sobre todo una alternativa sostenible para el cultivo de plantas de jardín.

De qué material están hechas…

Las macetas con reserva de agua normalmente son de plástico para no perder el agua como lo haría la terracota o el barro. Además, el plástico es un material más ligero por lo que el peso de la planta en sí con su cepellón más el de la reserva de agua no es tan elevado…

Se han conseguido PVCs y polipropilenos mates coloreados con una estética más que aceptable que dan la apariencia de barro o porcelana pintada. También las hemos visto muy bonitas en ratán sintético.

Las formas de estas macetas, además, están muy cuidadas, y es posible encontrar desde las clásicas circulares a otras de formas cuadradas y rectangualres con los ángulos  biselados…

En qué fijarse al comprar hidrojardineras

Un aspecto importante es, por supuesto, el volumen de la maceta. Cuanto más grande, mayor será el depósito de agua que alberga y más largo podrá ser el periodo de autoabastecimiento…

Por otro lado, es importante cerciorarse de si la maceta en cuestión está indicada para interior y exterior, o sólo para exterior.

Algunas de estas macetas cuentan además con ruedas para un transporte más sencillo.

Por último, la boca de riego debe ir dotada de una rejilla (de material plástico, haitualmente) para impedir que la hojarasca o cualquier otro objeto la bloquee.

Cómo manejar por primera vez una maceta con reserva de agua

Es importante leer bien las instrucciones del fabricante y seguirlas a rajatabla para el éxito del autorriego de nuestra planta.

• Antes de montar la jardinera se dejan en remojo los tubos de absorción o mechas (que tocarán el agua por un extremo y el sustrato por el otro) durante un buen rato para que se empapen bien de agua.

• Se acomete el montaje de la maceta con las mechas mojadas.

• Se echa el sustrato humedecido dejando espacio para el cepellón que es la parte de tierra adherida a las raíces de la planta.

• Una vez plantada, se riega por encima vigilando que el nivel de la reserva nunca exceda su máximo.

• La planta se debe regar así por encima todo el tiempo posible, incluso hasta un par de meses, para que enraíce bien en el nuevo sustrato.

• Se llena el tubo de autorriego, ahora sí, hasta su nivel adecuado, cuidando de que nunca exceda el máximo aconsejado…

Kits de autorriego adaptables

También se comercializan kits de autorriego adaptables a un gran número de macetas. Se trata de un depósito de agua que se cubre con una tapa. De ahí sale un tubo regulable en altura para adaptarse a contenedores de diferentes alturas.

Cuánto tiempo aguantan las plantas…

Con una maceta de autorriego se puede estar desde una semana hasta un mes sin regar una planta, aproximadamente. Pero conviene prever un periodo de observación, que nos dará una idea más aproximada de cuánto aguanta una especie o planta en concreto en un sitio determinado…

Precios

Las hidrojardineras son más caras que las macetas normales, pero existe una gran variedad de modelos a partir de unos 15 euros (con 26 cm de altura y otros 26 cm de diámetro). Por 50 euros ya es posible elegir entre muchas formas, colores y tamaños, en redondo, por ejemplo de 42 cm de diámetro.

Las macetas de autorriego de mayores dimensiones o materiales más novedosos, como las de ratán sintético, cuestan ya más de 90 euros el contenedor de 33x62x33 cm.

Fotografias: leroy merlin