La vivienda de unos coleccionistas de arte

El punto de partida del proyecto de esta vivienda fue el deseo de exponer  la colección de arte de los propietarios, que se encontraba escondida en una arquitectura anticuada, con colores demasiado intensos que no dejaba apreciar las pinturas, oscura y de largos y anodinos pasillos.

Bajo esta premisa de que las obras de arte fueran las protagonistas, se proyectó una arquitectura con tonos neutros a la vez que cálida, donde los únicos adornos fueran los cuadros, la luz y la expresividad de los diferentes materiales como la madera.

El proyecto de iluminación fue una de las principales bazas para alcanzar el ansiado resultado. El espacio fluye con la luz buscando una organización funcional más abierta e intensificando el foco en los puntos más atractivos. Incluso algunos espacios, como el pasillo, se han iluminado sólo a través de los cuadros.

En la entrada se ha vuelto a la configuración original para crear una zona de estar que prolongue visualmente el espacio de la cocina y haga de extensión del comedor cuando sea necesario.

El resto se ha reorganizado para aprovechar mejor los espacios, y con ello se consiguen unos espacios sencillos, sosegados.

Proyecto: NAN Arquitectos