Lunawood somete la madera a un ciclo combinado donde se alternan altas temperaturas y diferentes grados de humedad. Este tratamiento térmico intensivo transforma la estructura y propiedades de la madera, reduciendo en un 50% la tendencia natural de la madera a torcerse, hincharse o encogerse.
El resultado es que LunaWood es mucho más estable que la madera normal.
La humedad de equilibrio de madera termotratada es mucho menor que la de la madera normal y su resistencia a los ataques de xilófagos es igual a la del alerce, a la del roble o a la de la teca, dependiendo del grado de tratamiento.
El tratamiento da a la madera unas características, color y aspecto que la hacen parecida a las maderas tropicales. El tratamiento térmico también crea otras buenas cualidades como el aumento de la resistencia a la humedad, la durabilidad y la calidad de las propiedades aislantes.
Las posibilidades de uso de LunaWood son infinitas. Puede usarse para revestimientos exteriores e interiores, celosías, suelos y techos, muebles de jardín, fachadas y bancos,, saunas, vallas, terrazas…