Nuevas formas de tejer para modernas crafters
Las labores del hogar vuelven a vivir un momento de esplendor de la mano de las modernas crafters. La tendencia arrasa entre las jóvenes, y con ella han surgido nuevas formas de hacer labores, e instrumentos y materiales para tejer desde accesorios de moda como bufandas, gorros y bolsos a piezas de decoración como mantas, pantallas de lámpara, cestos y muchas otras…
Las labores ya no son lo que eran… Más que una forma de ahorrar (sin duda, son más baratos los productos tejidos de importación ya terminados), las labores se han convertido en una terapia relajante que estimula la creatividad y activa la mente y las manos. El mestizaje ha llegado también al mundo de las labores, y hoy las técnicas se entremezclan unas con otras, al igual que se intercambian los tipos de agujas para las diferentes labores... Las nuevas tendencias (punto de lana gruesa bastante suelto, por ejemplo) invitan además a los neófitos a aprender ya que no hay que cargarse de paciencia para terminar una labor, sino que los proyectos se realizan de forma sencilla y rápida.
Queda claro, pues, que hacer punto de la forma tradicional o de cualquier otra ya no es cosa de abuelas, sino una actividad de moda. Pero qué dirías si te contáramos que se puede tejer con sólo una aguja de ganchillo sin peligro de que se vayan los puntos… Sí, sí, has leído bien: tejer como si fuera punto pero en vez de con dos agujas, con la herramienta de hacer crochet… La técnica se llama Knooking, y es más fácil de aprender para los principiantes que la forma de hacer punto tradicional, con un resultado idéntico. La han adoptado muchas nuevas crafters, y aseguran que resulta más cómoda y sencilla que sujetar las dos agujas de tejer tradicionales.
Las agujas de doble punta son otra novedad que permite trabajar en proyectos tubulares como gorros, calcetines y muñecos tipo amigurimi. Son las antecesoras de las agujas circulares y vuelven a usarse porque al parecer el resultado con ellas es mucho mejor… (Precio: unos 9 €, 5 agujas).
Y sin duda ya habrás visto que las agujas de madera para tricotar son tendencia. Dicen las entendidas que deben ser de madera de haya, para que se deslicen por ellas mejor los puntos y envejezcan con total naturalidad. También se ven mucho las agujas de bambú, aunque estas no son nacionales. Considéralas una inversión, ya que cada par de agujas es para siempre… (Precio: 15 €, el par de agujas de madera de haya o de bambú de calidad en diferentes grosores).
El trapillo es el material de moda para hacer todo tipo de labores. Se puede comprar en dos versiones, una más gruesa y otra más ligera, o simplemente fabricarlo en casa a partir de camisetas que ya no te pongas. Se trata de restos de tela reciclados, por lo que ha sido durante tiempo el material favorito de los que sienten un mayor compromiso con el medio ambiente. Lástima que ya se produzca de forma industrial, por lo que la sostenibilidad del producto ha quedado en entredicho. Posavasos, cestos, alfombrillas, pulseras, bolsos… No hay objeto de decoración ni accesorio personal que se les resista a las más fans del trapillo. El trapillo se realiza con una aguja de ganchillo de madera de tamaño extragrande, y las que lo practican aseguran que produce una satisfacción inmediata, ya que un pequeño proyecto se puede hacer en un par de horas... No está recomendado para fabricar prendas de vestir, ya que su peso sería excesivo. (Precio: de 4 a 5 € la bobina; como cunde mucho, normalmente con una basta para un proyecto. Las agujas, a partir de 1,50 € si son de material acrílico).
Indudablemente, para empezar a tejer, si no se tiene a mano una madre o abuela que te enseñe, lo mejor es hacer un taller o curso de iniciación. Vienen a costar unos 45 € los de 4 horas, materiales sencillos incluidos.
Tutoriales para apreder a tejer
Hay auténtico furor con los talleres para aprender a tejer, pero internet también está rebosante de estupendos tutoriales para iniciarse en la mayoría de estas técnicas. Aquí os dejamos varias direcciones, aunque sin duda hay decenas de ellas más…
Fotografías: dmc, we are knitters, fancy windows
