Pedicuras con peces: los riesgos que debes conocer

La pedicura con peces o ictioterapia está en el ojo del huracán desde que científicos británicos alertaran hace un par de años sobre los riesgos de este tipo de tratamientos spa. ¿Son seguras las pedicuras con peces garra rufa en los salones de belleza?

Nunca el cuidado y la belleza de los pies pareció entrañar tantos riesgos como ahora… Pero los controles que pasan los nuevos tratamientos de salón están poniendo en entredicho la seguridad de algunas prácticas comunes… Los pececillos que eliminan las células muertas de la piel en los pies no se han prohibido en todos los países (sí en 10 estados de Estados Unidos y otros tantos de Canadá), pero se ha alertado para que determinados grupos de riesgo eviten este tipo de pedicura…

Los peces garra rufa, que parecían los sustitutos de los productos y útiles clásicos para eliminar las durezas y pieles muertas de los pies, se importan de países como Turquía e Indonesia. En algunas pruebas realizadas en peces importados se detectó un tipo de estreptococo que puede causar neumonía, infección en los huesos y las articulaciones e incluso en la sangre de las personas. Una publicación científica que se publica en un centro de prevención de las enfermedades de Atlanta también alertó sobre otro tipo de bacterias encontradas en los spas de peces que son resistentes a muchos antibióticos…

Quiénes deben evitarlas…

El consejo de las autoridades sanitarias de Estados Unidos y Gran Bretaña es, en definitiva, alertar para que no utilicen este tipo de servicio de pedicura a las personas que tengan cortes abiertos o ampollas en los pies, y sobre todo a aquellas que tengan enfermedades crónicas como diabetes o un sistema inmunológico debilitado por el SIDA, el cáncer o una avanzada edad.

Parece que uno de los problemas son las heces que los pequeños peces depositan en los acuarios donde viven y donde los humanos metemos los pies. Otro problema es que los peces pueden trasmitir infecciones de unos usuarios a otros. En muchos locales es prácticamente imposible que se limpien correctamente los acuarios entre tratamientos, y además algunas organizaciones de defensa de los animales consideran que es una crueldad mantener a los pequeños peces muertos de hambre para que acudan en masa a comer las pieles muertas de los pies…

Por otro lado, en muchos centros de belleza se han sustituido los peces garra rufa certificados por otros más económicos procedentes de países asiáticos. Los chin-chin, que así se llaman tienen dientes cuando se hacen adultos, y por tanto es mayor el riesgo de que hagan pequeños cortes en la piel y transmitan enfermedades. Lo mejor es pedir al centro al que se acude un certificado de autenticidad de los peces garra rufa.

En algunos centros de belleza donde se realizan pedicuras spa con peces en Alemania se ha comenzado a pedir a los usuarios que aporten los resultados de un análisis de sangre reciente.

Fotografias: sanlucarfishspa,  pezspa.com