Los procesadores de alimentos que cocinan son electrodomésticos relativamente nuevos en las cocinas. Estos pequeños ordenadores programables con múltiples funciones pueden sustituir, en algunos casos, todas las tareas que requiere cocinar determinados platos, desde picar hasta freír o cocer los alimentos. Resultan muy cómodos y quizá sean el adelanto de lo que será la cocina del futuro…
En realidad se trata de electrodomésticos que dan un paso más, sustituyendo la electricidad por la electrónica, lo que les permite hacer más funciones y, lo que es más importante, en secuencias que no necesitan la intervención del cocinero, más que al principio del proceso y al final.
Quienes disponen de un procesador de alimentos con concción dicen que son insustituibles en la realización de cremas de verduras, gazpacho o croquetas. Pero además sirven para realizar muchos otros platos de principio a fin, lo que resulta una gran ventaja para comer de forma saludable en la ajetreada vida urbana en que apenas tenemos tiempo para guisar.
Los procesadores de alimentos que cocinan presentan dos desventajas: su elevado precio y que normalmente hay que tener siempre a mano el libro de recetas para poner las cantidades exactas y programar el aparato para cada receta. Aunque con la práctica es posible determinar qué funciones necesita el aparato para cocinar un plato, lo cierto es que ocurre como con los microondas: que cocinan, pero nadie saber hacerlo sin un libro de recetas delante que nos marque los tiempos... Por eso habrás oído a algunas personas decir que “los usaron al principio”, pero luego los "aparcaron" y ya sólo realizan dos o tres recetas con ellos.
Estos equipos pueden ser una buena inversión para parejas que no han comprado ningún electrodoméstico aún (batidora, picadora, robot de cocina, molinillo, etc.) o simplemente para aquellos a los que no les gusta cocinar, pero sí comer bien. Para los ‘cocinillas’ suelen ser un accesorio que les ayuda en muchos platos, pero que no sustituye totalmente a la cocina tradicional. Suelen disponer de ellos en los restaurantes, lo que da una medida de la utilidad del aparato en muchas aplicaciones.
Su principal ventaja es que economiza espacio al tener las funciones de varios aparatos dispersos en uno solo, que apenas ensucias enseres al cocinar y que no necesitas asistir presencialmente al proceso de cocción de los alimentos. También que reduce el consumo de grasas y condimentos al mínimo.
Se trata además de aparatos robustos que no suelen dar averías, y que disponen de un buen servicio técnico donde, en caso de surgir, saben repararlos y disponen siempre de piezas de recambio.
Básicamente estos aparatos realizan las siguientes funciones:
Existen numerosos modelos en el mercado, y conviene fijarse bien en la potencia (y el consiguiente consumo eléctrico), ya que son aparatos que pasan bastante tiempo encendidos. Otro factor importante es si incorpora báscula electrónica o no (ya que entonces habrá que realizar las mediciones aparte), o si las cuchillas van incorporadas en el vaso. Algunos equipos realizan estas funciones en otro bol, pero entonces hay que hacer un seguimiento presencial de la receta, aunque esta desventaja inicial permite a la larga realizar tareas de cocina más profesionales con el equipo. Si tu móvil es la comodidad, descarta los aparatos que dispersen las tareas en varios vasos.
El contenedor de los alimentos suele ser de acero inoxidable o aluminio pulido de gran calidad y se encaja en el equipo con diferentes tipos de anclajes. No hay ningún misterio en el sistema de cocción de los alimentos: suele ser inducción (My Cook de Moulinex y Cooking Chef de Kenwood) o resistencias (Thermomix). En todo caso, el secreto está en las combinación de diferentes programas y temperaturas de cocción de los equipos.
Otro factor que puede dirigir la decisión de compra hacia un aparato u otro es el hecho de que tenga posibilidad de programar con antelación y mantener la comida caliente hasta el momento de servirla en la mesa.
Modelos y precios
Fotografías: Vorwerk
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Categorías: Electrónica de consumo
Publicado el: 07-03-2012 | Autor: María Tebar