Restaurar muebles encerados

Los muebles de tipo rústico y colonial, tan atractivos y característicos de las casas de campo, deben gran parte de su encanto a los bellos acabados con cera natural que se les suelen aplicar. La cera es una protección estupenda para la madera, que la nutre y la protege de los ataques de la humedad. Pero con el paso del tiempo, el polvo se acumula sobre las capas de cera y las ennegrece; además, el pulido desaparece y el cálido brillo de la cera se pierde, dejando la madera mate y apagada. Recuperar todo el esplendor de estos muebles es una tarea muy sencilla; merece la pena dedicarles un rato para poder disfrutar de su belleza sin impedimento.

Los materiales necesarios para recuperar un mueble encerado son: líquido desencerador (lo tienen muchas marcas de productos para el cuidado de la madera, pero también podemos usar esencia de trementina mezclada con aceite de linaza en una proporción de 2/3 en volumen, bien agitada), lanilla de acero nº 0000, trapos que no suelten pelo, esencia de trementina (aguarrás puro) y cera virgen o cera de anticuario. En primer lugar hay que limpiar el mueble a fondo con el desencerador o la mezcla, frotando bien con la lanilla de acero y limpiando después con los paños. En los recovecos podemos usar un cepillo de dientes viejo. La limpieza es fundamental para un buen acabado. Una vez eliminadas las capas de cera antiguas y toda la suciedad acumulada, tendremos que proceder al encerado.

Existen dos opciones: emplear una cera de anticuario de buena calidad o preparar nuestra propia mezcla. Si vamos a hacerla nosotros, necesitaremos calentar cera virgen en bloque al baño María en un recipiente de metal o cristal. Hay que cubrir la cera con esencia de trementina y dejar que se caliente la mezcla sin que llegue a hervir (es fundamental colocarse mascarilla y hacerlo en un lugar con buena ventilación; preferiblemente, con un hornillo de gas al aire libre). Si a la cera virgen le añadimos un trozo de cera de carnauba el acabado será mucho más resistente a la humedad, perfecto para muebles de cocinas y baños.

Cuando la cera se haya fundido, sacaremos el recipiente del agua y dejaremos que se temple. Aplicar la cera templada es mejor que hacerlo en frío, al estar más blanda. Para encerar los muebles, se extiende la cera con paño o brocha y se deja secar durante dos horas; después se le saca brillo con un cepillo para zapatos envuelto en una media. Después volveremos a dar otra mano de cera, y esperaremos 24 horas para volverla a abrillantar.

Imágenes: Frenchfinds.co,uk, Zetameta.