Cuando nos disponemos a pintar una pared, generalmente nos encontramos con agujeros que tenemos que tapar. Agujeros que alojaron tacos en los que colgamos cuadros o sujetamos muebles.
Para extraer el taco podemos valernos de un sacacorchos. Después tendremos que rellenarlo por competo. Para ello, haremos una bolita de algodón que humedeceremos con masilla tapagrietas.
Una vez relleno el agujero, deberemos alisar la parte exterior con la misma masilla, y podremos empezar a pintar la pared del color deseado.
Fotografía: Leo Reynolds