Ri & Co Bistró Restaurant

El Grao de Castellón, su paisaje, su tradición y el sabor mediterráneo son la fuente de inspiración para este restaurante ubicado en un entorno incomparable frente al mar. El estudio Vitale ha realizado el proyecto global de diseño, interiorismo y estrategia corporativa que ha dado como resultado un negocio que fusiona pasado y presente en un ambiente familiar, ecléctico y festivo.

El local de 185 m2 y planta rectangular, ubicada en paralelo a la playa, se distribuye proporcionando unos 60 m2 a la cocina y 125 m2 a la zona de comedor. Una de las prioridades en la disposición de mesas era la perpendicularidad al mar para conseguir unas inmejorables vistas del paisaje desde las mesas.

La carta del restaurante rescata la tradición culinaria y la lleva hacia una filosofía slow, donde los platos tradicionales autóctonos exploran las nuevas tendencias y los comensales se relacionan en un entorno acogedor, sin prisas, diseñado para disfrutar de la comida y también de la compañía.

Bajo esta filosofía se ha dispuesto mesas comunales, bancadas y zonas con un toque más íntimo, para así satisfacer los diferentes gustos y necesidades que puedan tener los clientes.  Se ha tenido en cuenta a un público diverso donde mayores y pequeños puedan convivir de forma relajada. Para ello el restaurante cuenta con un rincón de lectura, perfecto para mantener a los niños entretenidos, y una zona lounge para prolongar las sobremesas de los adultos.

El restaurante se ha diseñado como una ampliación del entorno, abierto completamente al exterior para que terraza e interior se fusionen. La fachada a mar se ha modulado mediante un cerramiento plegable de vidrio que se abre por completo y puede ampliar el espacio si la climatología lo permite, dependiendo de la época del año.

Las estructuras metálicas tubulares visten los techos de la zona central proporcionando un dinamismo visual con el cruce de líneas, y también se han empleado para recubrir los pilares y ordenar el espacio, a la vez que actúan como separadores y proporcionan cierta privacidad en la zona de las mesas.

La estética y los materiales empleados también trasladan la fusión entre la tradición y la actualidad. Se han tratado de evocar a las casetas playeras típicas de principios del siglo XX con las  características rayas de colores,  y se han utilizado lámparas marineras. Para el mobiliario se han seleccionado materiales naturales y nobles como la madera de roble y el mármol.

Proyecto y fotografías: Vitale