Un comedor bien vestido
¿No os apetece sentaros a comer en esta mesa? Es una mesa de diario, una mes que podríamos encontrar en la casa de cualquiera de nosotros, la única diferencia es el mimo y el cuidado que se ha puesto para montarla y colocar cada una de las cosas que necesitamos para comer.
Todo el montaje se ha llevado a cabo en tonos claros, verdes, grises, beiges, menta… y con estampados de cuadros muy pequeñitos.
La base de la mesa son los diferentes manteles que se han utilizado para vestirlas, y que superpuestos unos sobre otros crean una sensación de movimiento muy original. En primer lugar encontramos un mantel rectangular cubriendo la totalidad de la mesa.
Sobre él un mantel más pequeño, cuadrado y con un fondo más claro. Éste se ha colocado en diagonal, permitiendo que las cuatro puntas cuelguen por cada uno de los lados de la mesa.
Perfectamente ordenados sobre este mantel se han colocado dos caminos de mesa que señalan el lugar en el que debe colocarse el plato de cada comensal.
La servilleta también se ha colocado siguiendo el mismo estilo, de forma transversal sobre el plato.
Una mesa llena de detalles, que sin lugar a dudas a todos nos gustaría encontrar al llegar cada día a nuestro hogar.
Fotografías: La Mallorquina
