El salón que hoy os mostramos es una propuesta ideal para espacios pequeños y carentes de luz natural. Está decorado en base a dos tonos, azul celeste y amarillo pastel, dos colores muy claros que potencian la luz y la reflejan, haciendo que parezca mayor de lo que en realidad es.
estos colores se han introducido en la estancia a través de la pitura utilizada en la decoración de las paredes, y también a través de al colección de textiles coordinados con que se ha tapizado el sofá y se han confeccionado las cortinas y los cojines.
Fotografías: Jane Churchill