Ahora que ya hace un mes que todos volvimos de vacaciones e hicimos eso que este año llamamos rentrée, empezamos a sentir nostalgia del verano... por eos hoy al ver esta cocina con vistas al mar no he podido sino acordarme de los días de verano.
es una cocina de madera cuya distribución alargada ha permitido incorporar un comedor en uno de los extremos, un comedor que nso permitirá comer cada día disfrutando de esas maravillosas vistas, porque aunque el clima haya cambiado y los días de sol y calor sean ya lejanos, disfritar de la vista del mar es un privilegio incluso en el más cerrado de los inviernos.
Al formar parte de un espacio global en el que también se encuentra el salón, en esta cocina se ha optado por una estética más cercana a la de salón que a la de cocina, y eso hace mucho más agradable la visión y la estancia de este espacio cuando terminamos de cocinar.
Fotografías: Schmidt