Una escultura en el jardín
Hay piezas que van mucho más allá de la pura funcionalidad. Piezas que han nacido con la vocación de gustar, sorprender y despertar sensibilidades.
Éste es el caso de la lámpara Break de la firma Vibia: una luminaria de exterior que bien podría pasar por una escultura.
Break: romper. Esa fue la idea inicial de los diseñadores Xuclà & Alemany, con el gran bloque vertical que sostiene la lámpara y cuya cabeza parece querer separarse, abriendo una pequeña ranura por donde sale el haz de luz. De esta forma se consigue una iluminación agradable y sutil, que permite disfrutar del jardín nocturno y sus formas, sin avasallar ni provocar deslumbramientos.
Esta luminaria se encuentra en diferentes acabados, que permiten integrarla en distintos ambientes: desde el más industrial y urbano, de hormigón, el más rústico de óxido, a los modernos lacados en color blanco o plata. La luz atraviesa un difusor de metacrilato, capaz de soportar las duras condiciones del exterior.
